Allí.
En el hueco de las cosas bonitas.
O dentro de aquella caja de música
que quedó sin bailarina.
Mejor allí,
en aquel frondoso parque.
Bueno, ahí no,
que seguro me pierdo.
Ya sé.
En la hoja de aquel libro
o el último trago que bebimos.
¿Tampoco?
¿Tan poco quedamos?
A ver, a ver...
¿Y dentro de aquella canción?
¿En el resto de tu plato?
¿En la cartera?
Nada, que a todo dices que no...
Ganas siempre
con mi hastío.
Entonces,
guárdame lejos,
allá en el olvido,
que seguro ya tienes hecho
un hueco
a
mi
medida.
miércoles, 27 de junio de 2018
viernes, 15 de junio de 2018
Músicas de fondo
Volver a aquello
que tanto te ha dado.
Volver a gritar por dentro
como si estuvieras en
la primera fila del concierto.
Erizar la piel, como constante.
Imágenes que vuelven a tu cabeza
y que nunca se fueron.
Gente preciosa, emociones,
planes, carreteras,
vidas compartidas,
canciones que han movido tanto
que solo sus primeros acordes
retuercen.
Siempre regreso a la música
porque en mi vida,
significa tanto
que no sé por dónde
empezar a agradecerle.
que tanto te ha dado.
Volver a gritar por dentro
como si estuvieras en
la primera fila del concierto.
Erizar la piel, como constante.
Imágenes que vuelven a tu cabeza
y que nunca se fueron.
Gente preciosa, emociones,
planes, carreteras,
vidas compartidas,
canciones que han movido tanto
que solo sus primeros acordes
retuercen.
Siempre regreso a la música
porque en mi vida,
significa tanto
que no sé por dónde
empezar a agradecerle.
martes, 12 de junio de 2018
Llegó arrasando todo
Vino de golpe el vacío.
Ni las palabras consuelan
ni la primavera trae sus flores.
Se volvió invierno,
con su hielo dentro.
Se revolvió la cama
y ni las sábanas descansan.
Entró la tristeza,
que no encuentra
hueco de salida.
Es tu miedo
el que hace eco
en mi interior.
Qué tramposo el destino
que hace cosas a su antojo
y siempre, te acaba pillando.
Y aunque clame a la fuerza,
me hago chiquitita
cada vez que me cruzo
con
tus
ojos.
Ni las palabras consuelan
ni la primavera trae sus flores.
Se volvió invierno,
con su hielo dentro.
Se revolvió la cama
y ni las sábanas descansan.
Entró la tristeza,
que no encuentra
hueco de salida.
Es tu miedo
el que hace eco
en mi interior.
Qué tramposo el destino
que hace cosas a su antojo
y siempre, te acaba pillando.
Y aunque clame a la fuerza,
me hago chiquitita
cada vez que me cruzo
con
tus
ojos.
Genio y figura
Siempre con el chiste por delante
y tu vida en mil historias,
intentando así aliviar la pena,
jugando al escondite con tu miedo.
Yo te apretaba la mano,
con tu '¡ay, que nuera ésta!'
Qué injusta esta lucha
que con gran ánimo has lidiado.
Ganaste batallas
y sumaste esperanza a nuestros días.
Conocerte y quererte
salió solo,
incluido el incendio
en mis adentros
cuando salía por tu boca
tanta rabia.
Has querido mucho a 'los madriles'
con cariños muy sinceros,
con caprichos en el plato,
limones de tu árbol
y gran cantidad de atenciones.
Todo, bien guardadito lo tengo.
Soledad la que buscabas
y también tu 'estar a todo',
tus películas, la radio,
los pronósticos del tiempo
y todo el 'sabor natural' a vida
que aún tenías que disfrutar.
Genio y figura aquí
hasta que te dejaron serlo.
Que vida ésta,
que nadie logra entenderla.
Te han quitado el aire
con la paz del sueño
de tu gustosa siesta
que ahora se hace eterna,
a la vez que nos duele el pecho
al recordar a cada rato.
Sobre todo a ella.
Genio y figura
naciste, viviste y,
demasiado pronto,
te fuiste.
Seguro ya tienes a todos,
allá donde estés,
con la risa de ventaja.
Mientras estemos aquí,
intentaremos que
no se nos olvide
n a d a.
Tú, suegro,
por si acaso,
sigue echándonos
un ojo.
y tu vida en mil historias,
intentando así aliviar la pena,
jugando al escondite con tu miedo.
Yo te apretaba la mano,
con tu '¡ay, que nuera ésta!'
Qué injusta esta lucha
que con gran ánimo has lidiado.
Ganaste batallas
y sumaste esperanza a nuestros días.
Conocerte y quererte
salió solo,
incluido el incendio
en mis adentros
cuando salía por tu boca
tanta rabia.
Has querido mucho a 'los madriles'
con cariños muy sinceros,
con caprichos en el plato,
limones de tu árbol
y gran cantidad de atenciones.
Todo, bien guardadito lo tengo.
Soledad la que buscabas
y también tu 'estar a todo',
tus películas, la radio,
los pronósticos del tiempo
y todo el 'sabor natural' a vida
que aún tenías que disfrutar.
Genio y figura aquí
hasta que te dejaron serlo.
Que vida ésta,
que nadie logra entenderla.
Te han quitado el aire
con la paz del sueño
de tu gustosa siesta
que ahora se hace eterna,
a la vez que nos duele el pecho
al recordar a cada rato.
Sobre todo a ella.
Genio y figura
naciste, viviste y,
demasiado pronto,
te fuiste.
Seguro ya tienes a todos,
allá donde estés,
con la risa de ventaja.
Mientras estemos aquí,
intentaremos que
no se nos olvide
n a d a.
Tú, suegro,
por si acaso,
sigue echándonos
un ojo.
lunes, 4 de junio de 2018
Los que fuimos
Ya se han ido aquellos que fuimos.
Ya ni puedo ver sus sombras.
No dejaron rastro de la inocencia
al creer la eternidad
sumisa a nuestros pies.
Han dejado el eco de la risa
y la fresca ingenuidad que,
de golpe, aprendió a dormirse.
Aquellos que fuimos,
los que ya no somos ni seremos,
no han dejado huella de los juegos.
Se han llevado
t o d o.
Ahora que ya no estamos,
cuesta entender
que ya no seremos los mismos
y que la zanja que marcó el final
yo ni la vi llegar.
Me cuesta despedirme
aunque ya no nos vea.
Me duele el ya no más,
que sea tan diferente.
Temo la pérdida
de la niña,
de la infancia,
de la verdad,
de saberme invencible
si tu mano sujetaba mis miedos.
Aquellos que fuimos
ya no somos.
Y este frío,
no se pasa.
Ya ni puedo ver sus sombras.
No dejaron rastro de la inocencia
al creer la eternidad
sumisa a nuestros pies.
Han dejado el eco de la risa
y la fresca ingenuidad que,
de golpe, aprendió a dormirse.
Aquellos que fuimos,
los que ya no somos ni seremos,
no han dejado huella de los juegos.
Se han llevado
t o d o.
Ahora que ya no estamos,
cuesta entender
que ya no seremos los mismos
y que la zanja que marcó el final
yo ni la vi llegar.
Me cuesta despedirme
aunque ya no nos vea.
Me duele el ya no más,
que sea tan diferente.
Temo la pérdida
de la niña,
de la infancia,
de la verdad,
de saberme invencible
si tu mano sujetaba mis miedos.
Aquellos que fuimos
ya no somos.
Y este frío,
no se pasa.
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