viernes, 6 de septiembre de 2019

Palabras para Ana

Se acabó la prisa,
cambiaron prioridades.
Los relojes ya no importan,
tú llevas las riendas.

Aquí, madre sobrada de ganas,
se presenta a tu servicio.
Brazos fuertes, pecho firme
e infinitos besos para darte.

Eres revolución deseada,
regalo inmenso a cada instante.
Lo que pude imaginar no llega,
ni por asomo,
a la realidad de sostenerte
en mi regazo.

Eres AMOR del bueno,
que nos vuelca el corazón.
Hemos nacido contigo,
aprendizaje constante,
mientras nos enseñas que
felicidad lleva tu nombre.

Nos tienes enamorados,
prendados de tus gestos,
estirones, muecas, ruidos,
de ese nervio que te hace
respirar sin tregua la vida.