lunes, 29 de febrero de 2016

Salidas de emergencia

Si te vieras desde fuera, no te entenderías.
Querrías estamparte contra mil muros
a ver si así, de una maldita vez, despiertas.

Muchos años durmiendo en vida
Demasiados, sin vivir en tí
La eternidad huyendo de tí.
Transitando de puntillas, con la cabeza baja
Sin atreverte, si quiera, a reconocerte.

Tus años, maltratándote,
mendigando cariños interesados.
buscando maneras furtivas para salir de una burbuja,
en la que tú mismo te encierras, una y otra vez.

Abres puertas sencillas, las salidas de emergencia,
aquellas en las que esperan falsos amores, planes vacíos,
que te llenan al mínimo la capacidad de supervivencia.
Recreándote sólo en reprocharte culpando al mundo de las desgracias.

Si te vieras desde fuera...
Si (te) dieras menos importancia...
Si salieras de tí...
Entenderías que el alfiler lo tienes tú.
Única persona capaz de hacer estallar la burbuja,
y hacerlo, desde dentro.
Explotándola sin treguas.

No, no es fácil. Nada lo es.
La falsa seguridad de la burbuja es como
un oasis (el que nunca aparece) en el desierto,
-sigues empeñado en ello hasta el último aliento-.
Sin embargo,
Lo que te espera fuera, es la vida, amigo.
Y, por ella, vale la pena todo esfuerzo.

- Diga lo que diga nada es tan verdad como que
es responsabilidad y decisión tuya
cómo recorrer tu camino...-
Yo solo estoy cerca para compartir-lo




lunes, 22 de febrero de 2016

Sin secretos

Ocurrió.
La tienes. Ya es, en parte, tuya también.

Tienes mi debilidad en tu mano
Mi losa más temida
Mi parte más sufrida
Mi enemiga, aunque es mi yo, también.

El precipicio sin paracaídas,
El pasado golpeando la puerta,
El miedo, la culpa, mi sinrazón,...

Mi desnudez completa,
por dentro y por fuera,
reposa ya, cada noche, sobre tí.

No me quedan armas ya.
No guardo nada más en la manga,
Lo prometo.
Has visto toda mi oscuridad.

Ahora, que la tienes tú
que ya la conoces, que sabes me duele,..
también te entrego (no debería, lo sé) el poder de moldearla,
ayudarme a aligerarla o hacer la carga más pesada.
Precio injusto de mostrarse a corazón abierto
y el tuyo, de recibirlo...

Confianza ciega y cierto temor.
Completamente vulnerable ante tí.

Cuídala, por favor.









viernes, 19 de febrero de 2016

Menos es más

... Llega el momento de..

Entender la despedida 
al forzar un re-encuentro.

Quedarte con todo lo bueno
en el rincón de lo más preciado.

Dejar ir... aunque te cueste.
Y que te dejen ir, aunque esto, esto no cueste.

-¿Será la madurez?-

#ValeParaTodo





jueves, 18 de febrero de 2016

Importas TU (lo dice un globo)

Es sabido por todos, por todo tipo de personas y niños,
que un globo, al inflarse mucho
llega a un límite en que el plástico no da más de sí mismo...
y explota, estalla y revienta. 

En la vida que cada uno va pudiendo hacer,
somos un poco -mucho- globos.
Avanzamos con más o menos aire,
según nos soplen y -más aún- nos soplemos nosotros mismos.

Muchas veces llegamos a los extremos 
los que -no aguantan ni un soplido-
y los que aguantan infinitos.
Al ocurrir esto con frecuencia, 
el globo puede llegar al punto de no retorno,
donde ya nunca podrá ser como antes. 

Para que el globo mantenga presión, forma y aire en su interior
hay que cuidarlo con esmero y dedicación.
No es cuestión de ponerlo en una urna 
y mantenerlo constante.
Tampoco consiste en dárselo a otro para que lo cuide por ti (¡nunca!),
y no es necesario esconderlo para guardar en vitrina su valor.
Ha de salir a pasear todos los días
y relacionarse con los otros globos... 

Ahora bien:
El globo puede mantenerse en buenas condiciones, 
si es capaz de hacerse valer -que no imponer- 

Difícil tarea que, como en las mejores recetas,
requiere una preparación. Los pasos que puede seguir son los siguientes: 
(Intente no pasar al siguiente hasta que no haya logrado el anterior)

1. Quiera a su globo. Es suyo y forma parte de usted 
2. Acéptelo. Si no, estará explotándolo constantemente. 
3. Defiéndalo cuando: 
      - Necesite aire de otra persona (pídalo)
      - Lo sienta mal, triste, enfadado,... (háblelo)
      - No lo sienta querido, cuidado... (dígalo)
      - No pueda decir que NO (y de paso, pruebe a decirlo) 
      - Tenga impulsos incontrolables de responder a las necesidades de otros (¿y las de su globo?)
      -  Se olvide de sí... (sin el globo, no hay nada)
      - Busque que todos le quieran... (ni lo intente, no es posible)
      - Niegue de si mismo... (reconduzcalo) 
     - Quiera que brillen otros globos más que él... (no es una competición de globos... sino un encaje) 
4. Compártalo. No se quede el globo sólo para usted.

Introducir todos los ingredientes con esmero y removemos despacio. 
Importante no olvidar repetir esto todos los días, 
hasta que cojamos destreza en el arte de vivir queriéndose 
y respetándose a sí mismo.  





martes, 9 de febrero de 2016

La "libertad", presa por las comillas.

"Libertad"
Sí. Con sus comillas.
¿Qué significa sin ellas?

"Libertad", que nos venden.
Cuando salimos a la calle
a gritar aquello que creemos nuestro.

"Libertad", que daña.
"Libertad de expresión" pero maltratando al de al lado.
Al revés, también.
Bonita esa "libertad", sí...

En nombre de "Libertad" cometemos barbaridades
Empeñados en "la mía", "la mía"...
¿Y la de mi vecino?
¿Acaso no tendrá la misma que yo?
¿Por qué nos empeñamos en aplastarla, haciendo valer solo la nuestra?

"Libertad", de los medios.
Muñecos de lo que vemos,
de lo que oímos
de lo que nos quieren hacer creer todos y cada uno de ellos
que se creen "libres" también.

"Libertad", de pacotilla,
"Libertad", para el insulto,
para la guerra, para el desprecio al diferente.
"Libertad", manga ancha para desvalijar-te y arrasar con tus principios, cuales sean.
"Libertad", de los valores perdidos.
"Libertad", para pisar, cuanto más fuerte mejor.
Tan egoísta, ella.

"Libertad", tan esclava.
Que no tenemos ni idea.

Ingenuos, creemos que tomamos decisiones en su nombre.
"Marionetas" de partidos, de equipos, de credos, de modelos,...
Dejamos moldear nuestra amada "libertad"
sin saber que no lo somos.

No lo somos, no. Ni la tenemos.
Porque nos sobra mucha y nos falta toda.
Se llena la boca al nombrarla mientras nos vaciamos.

"Libertad" sin Respeto solo es el canto y el encanto a uno mismo,
tanto, que apesta. Y sí, esto lo bordamos.
¿Quién se atreve a mirar al otro?

Y ahora me pregunto, ¿quién coño es libre?



jueves, 4 de febrero de 2016

Emoción uno. Tristeza

Sufriste mi destierro a los abismos.
Al peor, si lo hay, de los infiernos.
A ver si así caías en la trampa final,
la que no tiene retorno.
Tu desaparición, por fin.

Cerré la puerta en tus narices.
Ni un mísero hueco en mí. Y menos para tí.
No te quise
(Y creo que pocos lo hacen).

¿Sabes? Es que haces difícil querer-te.
Cuando llegas, intentas arrasar con todo a tu paso.
Invades.
(cuando los espacios personales son bienes muy preciados).

Lo fácil es negarte. Lo imposible, deshacerse de tí.
El tiempo invertido en intentarlo es alargarte en la agonía.
La eternidad pasa intentando enterrarte.

Te enquistas, encallas. Dejando huellas que magullan.
Duelen, escuecen y sangran.
Cuando parecen cicatrizar, los puntos se re-abren.
Enferman y se infectan.

No hay exilio posible al que enviarte.

El mayor de los aprendizajes y quizás el más costoso
Es darnos la oportunidad de sentirte,
aceptarte,
no juzgarte ni exigirte.

Solo así es posible cambiar, avanzar y superar-te.
Para que cuando vuelvas (siempre lo haces)
estar preparados para recibirte.
Dejarte hacer, sin negarte.
Y hacerte frente.

Tristeza, compañera de caminos.
No habrá más escondites para tí.
Aunque duelas.
Lo prometo.